Izquierda Unida-Mérida considera que la reducción del importe del contrato para concesión del servicio de recogida y limpieza de basura gestionado por Fomento de Construcciones y Contratas, debe descansar sobre los beneficios de la empresa, y en ningún caso sobre la disminución de la calidad del servicio.
La disminución del precio del contrato en base a la reducción de las prestaciones que debe asumir la empresa, no supone una mejora de la eficiencia del servicio, sino un mero recorte que perjudica el mantenimiento de limpieza de las calles de nuestra ciudad.
Según consta en los distintos presupuestos y en las cuentas generales del Ayuntamiento, debemos recodar que la coste del servicio de recogida y limpieza de basura supone a las arcas municipales un coste aproximado de seis millones de euros anuales, es decir 1.000 millones de las antiguas pesetas, lo que en nuestra opinión además de excesivo, deja un margen suficiente como para que la reducción del coste del servicio se realice en base a la reducción de los beneficios de la empresa, y en ningún caso, sobre el empeoramiento de las condiciones en que se lleva a cabo.
En estos términos, debemos señalar que el precio del contrato a favor de FFC como concesionaria del servicio, supone la aplicación anual de una subida en virtud de un valor idéntico al IPC, que por otra parte no se aplica de forma homóloga a los salarios de los trabajadores.
Esto supone que mientras la empresa exige el cumplimiento de sus derechos económicos, esta demanda no encuentra su traducción en una actualización similar de los derechos de los trabajadores.
Por todo ello, instamos a la Junta de Gobierno Local ha que lleve a cabo un modificación del contrato de la basura en base a la reducción de los beneficios de la empresa, al menos en parte, para evitar el deterioro de las condiciones de trabajo de los empleados, el empeoramiento del servicio, o el despido de los trabajadores, tal y como se ha hecho hasta la fecha.
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