IU-Mérida afirma que el Ayuntamiento perdió 140.000 euros al no tramitar ayudas para la EMT.

Izquierda Unida-Mérida afirma que el Ayuntamiento perdió 140.000 euros al no tramitar las ayudas convocadas por el Ministerio de Economía y Hacienda destinadas a la mejora de la financiación del servicio de transporte colectivo de pasajeros que presta la Empresa Municipal de Transporte.

Según establece la ley, los Ayuntamientos con más de 50.000 habitantes están obligados a prestar un servicios de transporte urbano colectivo de pasajeros, que en Mérida es gestionada directamente por el Ayuntamiento a través de la Empresa Municipal de Transportes.

Así, con objeto de facilitar las financiación del déficit que pudiera generar la gestión de este servicio, el Ministerio de Economía y Hacienda convoca, de modo anual, y con carácter periódico, subvenciones destinadas a la financiación del transporte colectivo urbano de pasajeros gestionado directa, o indirectamente, por corporaciones locales y mancomunidades, que el caso de Mérida  alcanza la cifra de 140.000 euros al año.

Durante el ejercicio correspondiente a 2007, el Ayuntamiento de Mérida, dejó de percibir dicha subvención, ya que la misma no fue solicitada por el Consistorio, a pesar de tener derecho a la misma, y al importe que supone esta línea de subvención para las arcas municipales. Lo que por nuestra parte sólo puede deberse a la incompetencia o la dejadez absoluta de los responsables municipales.

Este hecho es todavía más grave cuando es el propio Ministerio de Economía y Hacienda el que notifica por la vía legalmente establecida al propio Ayuntamiento la apertura del proceso de convocatoria de la mencionada subvención, que se repite con carácter periódico todos los años y siempre en las mismas fechas.

Para IU-Mérida esta situación pone de relieve la falta de interés del equipo de gobierno entrante y saliente en aquellas fechas por la salvaguarda de los intereses públicos, así como la absoluta descoordinación en la gestión de los asuntos públicos en la que se desenvuelven los servicios administrativos del Ayuntamiento y de la Empresa Municipal de Transporte.

En nuestra opinión, este tipo de situaciones ahogan la credibilidad de los responsables municipales encargados de la gestión de los recursos públicos, y empeoran la imagen de la administración pública como un instrumento eficaz al servicio de los ciudadanos.