El desprendimiento de una parte de la cubierta de la fachada del colegio a principios del pasado mes de marzo puso en evidencia la necesidad de acometer las obras en este colegio para reparar los daños causados y garantizar la seguridad de los alumnos y profesores.
El retraso en la realización de las obras tiene una difícil justificación, desde el momento en el que el desprendimiento de la cubierta se produjo hace aproximadamente 6 meses.
Según los datos de la propia administración regional, el 15 de marzo se inició la tramitación para la adjudicación de la obra, de la que el órgano correspondiente realizó una propuesta de adjudicación en fecha del pasado 29 de junio, y que finalmente no se tradujo en la finalización del procedimiento hasta finales de agosto.
El periodo de tiempo transcurrido de más de dos meses, entre estos dos momentos, la propuesta de resolución y finalización del procedimiento, ha supuesto un retraso que ha impedido aprovechar el periodo vacacional para la realización de las obras, lo que –a la espera de una mejor explicación– señala a la administración como la principal responsable de los perjuicios que en la actualidad sufrirán tanto los alumnos como los profesores durante los primeros meses del curso escolar. Sin que, por otra parte, se pueda garantizar la compatibilidad entre la continuación de las obras y el normal desarrollo de las clases.
A pesar del tiempo transcurrido, las obras para la remodelación de la cubierta no han comenzado hasta hace unos pocos días, por lo que el desarrollo de las obras coincidirá con el inicio y desarrollo del curso escolar, con las molestias y limitaciones que eso conlleva para la buena marcha del curso, tanto para los alumnos y profesionales que desempeñan su trabajo en este centro escolar.
Esta situación, requiere una explicación por parte de los responsables de la administración, que por otra parte han mostrado una absoluta falta de transparencia en el tratamiento de este asunto, tanto hacia los padres y madres de los alumnos, como hacia el conjunto de trabajadores que desempeñan sus funciones en este centro educativo.
Por todo ello, exigimos a la Consejería de Educación y Empleo que explique cuál es el conjunto de circunstancias que han provocado estos hechos, así como que comuniquen al AMPA y equipo directivo del colegio cuales son las medidas que van a adoptarse de cara al inicio del curso (que comienza el próximo miércoles), así como la fecha de finalización de las obras.
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