A preguntas de los/as periodistas en los pasillos del Congreso, Garzón puso como el “ejemplo muy claro” de esa “esperanza frustrada” la tramitación para acabar con los efectos de la nefasta ‘ley mordaza’ impuesta por el Gobierno del PP. “Faltaban dos semanas probablemente para que se pudiera derogar -recordó- y la convocatoria precipitada de elecciones anticipadas ha hecho que no se pudiera hacer y que sigamos, por tanto, con la ley del Partido Popular”.
En tono coloquial, recordó que ya se había despedido de algunos diputados, porque “nuestras relaciones son siempre de amistad y van más allá de la política”. Detalló que “me he despedido de aquellas personas que, sean de mi grupo o de otros grupos, han anunciado ellos mismos que no se van a presentar y ya no van a estar por aquí, como por ejemplo Alberto Montero, de su mismo grupo, o Joan Tardá, de ERC.
Sobre la posibilidad de revalidar su escaño, esta vez por Málaga, Alberto Garzón indicó que desde Izquierda Unida “estamos pensando en sacar los mejores resultados posibles y lograr los mejores acuerdos posibles también”. De la misma forma, sentenció que “en el acuerdo que hemos firmado tenemos unas buenas posiciones para Izquierda Unida y en ese sentido esperamos sacar suficiente representación, y una de ellas sería la mía”.
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