Izquierda Unida-Mérida pide al Ayuntamiento que lleve a cabo la gestión directa de los servicios de cafetería que hay en las distintas instalaciones municipales y abandone la gestión privada de los espacios públicos como fórmula para la administración de los servicios públicos.
A lo largo de los meses de abril y mayo el Ayuntamiento de Mérida ha iniciado los procesos de licitación de los servicios de cafetería, y la modificación de las condiciones de gestión y explotación de las mismas en varias instalaciones municipales entre las que se encuentra el Centro de Interpretación del Agua de Proserpina, las piscinas municipales del Complejo Guadiana, Argentina y Ciudad Deportiva, o en el centro de recepción de turista-man.
Desde IU-Mérida, entendemos que de nuevo el equipo de gobierno de nuestra ciudad ha renunciado a emplear la gestión municipal de los servicios públicos poniendo en manos privadas la obtención de los beneficios que tales actividades podrían suponer.
La apuesta del PSOE en Mérida por la gestión privada de los servicios que pueden ser administrados directamente por el Ayuntamiento es una de las causas de la falta de recursos que en la actualidad sufre la administración local a la hora de financiar los servicios públicos de su competencia.
De este modo, podemos señalar que la precaria situación económica que padece hoy en día las cuentas municipales encuentra, en parte, su explicación en el modelo de gestión que defiende tanto el equipo de gobierno como el PP.
En nuestra opinión, este tipo de medidas pone en evidencia la falta de voluntad del equipo de gobierno de modificar su modelo de ciudad. De este modo, nos encontramos con que a pesar de la difícil situación en la que nos ha situado las fórmulas económicas del PSOE y el PP, no podemos percibir ningún tipo de cambio en la filosofía que inspira los valores y las prioridades de ambas formación políticas.
Para IU-Mérida resulta verdaderamente preocupante que sean precisamente los encargados de la dirección y administración de los servicios municipales los que opten por formas privadas de gestión.
Por todo ello, instamos tal y como lo hemos hecho en multitud de ocasiones al equipo de gobierno para que de una vez por todas confíe en lo público como formas más adecuada de para la administración de los servicios que deben de disfrutar los ciudadanos y abandone los valores y prioridades que representa la lógica económica que desprecia lo público.
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