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Izquierda Unida-Mérida afirma que la defensa de un modelo de gestión público para el Festival de Teatro Clásico de Mérida es la mejor manera de garantizar su viabilidad económica.

La opacidad que se atribuye a la gestión del Festival de Teatro Clásico debe obtener su respuesta mediante la determinación de las responsabilidades de cualquier tipo que puedan deducirse de la actuación de sus responsables, sin que en ningún caso, entendamos que la solución a la crisis que vive el Festival pueda pasar por la privatización de su gestión.

Desde IU-Mérida, entendemos que las declaraciones de la Consejera de Cultura, Trinidad Nogales, más allá de la constatación de errores o posibles irregularidades cometidas por los gestores económicos del festival, pretenden abrir el camino de la justificación hacia la privatización en la gestión de uno de los eventos que dota a nuestra ciudad de mayor presencia y prestigio.



Así, instamos a la Consejera de Cultura a que demuestre la capacidad de su equipo y mantenga la gestión pública del festival como referente cultural y de ocio al servicio del ciudadano, del mismo modo que le instamos a que dilucide las posibles responsabilidades de toda índole que puedan derivarse de la gestión realizada en los últimos años.

En último lugar, exigimos a los responsables del patronato que dirige el Festival de Mérida a que hagan públicos los criterios para la realización de invitaciones a las obras, espectáculos y actuaciones que forman parte de la programación del Festival durante su última edición.

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