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Izquierda Unida-Mérida considera que el anuncio realizado por parte del equipo de gobierno sobre la evolución de los índices de ocupación de la zona azul suponen un ejercicio de manipulación que evidencia el nerviosismo del Partido Popular y de Vectalia sobre los resultados obtenidos hasta la fecha. 

Los datos sobre un 70% ocupación hechos públicos  por el equipo gobierno en referencia a la utilización de la zona azul suponen una burda manipulación que tan sólo pretende ocultar el patinazo que ha supuesto para el Partido Popular el establecimiento de la zona azul y el enorme rechazo que ha suscitado entre los vecinos.

La cifra de ocupación mostrada por el señor Molina, en representación del equipo de gobierno,  resulta absolutamente inverosímil, hasta el punto de que prácticamente duplica las previsiones iniciales incluidas en los estudios económicos realizados por un equipo de gobierno que durante los primeros días se ha mostrado más desconcertada por la escasísima ocupación que ha obtenido en los primeros días.

El nerviosismo del Partido Popular tiene su explicación en el rechazo que ha supuesto esta medida, y por unos resultados que  ponen en entredicho la futura viabilidad del contrato, por el que se adjudica a la empresa Vectalia la gestión de los autobuses urbanos, la grúa municipal, los aparcamientos públicos, ya que debido a la naturaleza deficitaria del resto de los servicios que forman parte del contrato,  la empresa sólo podrá obtener beneficios gracias a los ingresos procedentes de la zona azul, que hasta la fecha resultan del todo insuficientes.

Según lo anterior, el establecimiento de la zona azul no encuentra su explicación en razones vinculadas a la mejora del tráfico, o al aumento de la rotación de los vehículos aparcados, sino en la necesidad del equipo de gobierno de garantizar los beneficios de la empresa concesionaria, por lo que nos encontramos-de nuevo- ante una situación en la que la privatización de los servicios públicos obtiene como resultado la supeditación del interés general a la lógica de intereses particulares.

En estos términos, el fracaso obtenido hasta la fecha por la zona azul ha tenido como primero consecuencia el anuncio por parte de la empresa de la reducción de los servicios de autobuses urbanos durante el fin de semana con el objeto de intentar reducir coste ante el  incumplimiento de las previsiones de ingreso vinculados a la zona azul.

En definitiva, las cifras sobre ocupación hechas públicas por el equipo de gobierno y los recortes en otros servicios objeto del mismo contrato anunciados unilateralmente por la empresa,  suponen la mayor evidencia sobre la preocupación y el nerviosismo del Partido Popular y la empresa concesionaria frente al lógico rechazo que ha provocado en los ciudadanos la puesta marcha de una medida  tan inútil como injusta.

Fdo. Álvaro Vázquez Pinheiro.


Portavoz de IU en Mérida.                        


En Mérida, a 29 de junio de 2013

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