0

Izquierda Unida-Mérida afirma que las condiciones para la privatización de la empresa municipal de transporte han repercutido en las condiciones de seguridad en las que se presta el servicio.

La adjudicación del servicio público de transporte urbano de pasajeros a favor de la empresa vectalia se ha traducido en un empeoramiento de las condiciones de trabajo de los empleados que han visto aumentada el cómputo anual de horas de trabajo, al tiempo que la empresa ha suprimido los descansos de los que disfrutaban durante su jornada.

La eliminación de los descansos durante la jornada laboral de los conductores de los autobuses urbanos supone la creación de una situación de riesgo del todo innecesaria que puede provocar consecuencias graves para la seguridad e integridad de los pasajeros y de los propios empleados.


La causa de la eliminación de estos descansos la encontramos en la intención del equipo de gobierno de reducir los costes del servicio, debido a que el disfrute de las pausas por parte de los conductores suponía la sustitución de estos trabajadores por otros, mientras los primeros realizaban el descanso que les correspondía a lo largo de su jornada laboral. Por ello, la supresión de estas pausa implica una reducción de la plantilla, y por tanto del coste del servicio.

Para IU-Mérida esta situación resulta del todo insostenible debido a la naturaleza de las funciones desempeñadas por los conductores y los riesgos que comporta para ellos mismos así como para el conjunto de los usuarios del servicio y para del resto de los ciudadanos que pudieran verse envueltos en cualquier tipo de accidente o similar.

Asimismo, consideramos que esta situación ejemplifica la falta de escrúpulos que requiere la lógica del máximo beneficio, así como el corto recorrido de una forma de gestionar que supedita el respeto de unas condiciones de trabajo mínimas que garanticen que el servicio se presta en condiciones de seguridad y calidad, a la obtención de una reducción insignificante de los costes.

La adopción de este tipo de medidas nos da la talla de cual es el  modelo de gestión que se deriva de la privatización de los servicios públicos que defiende el Partido Popular, en el que la obtención de beneficios, y la reducción del déficit siempre obtiene su contrapartida en el deterioro de las condiciones laborales de sus empleados, así como en  el menosprecio a otras consideraciones como son la seguridad de los empleados y ciudadanos.




Publicar un comentario

 
Top