La interrupción del suministro eléctrico durante un periodo tan largo de tiempo puede producir perjuicios de toda índole, desde la conservación del género o alimentos en establecimientos comerciales o viviendas particulares, hasta los ocasionados a aquellos enfermos que requieran de aparatos eléctricos para la realización de sus tratamientos, a los que debemos sumar el inicio del descenso de las temperaturas.
Hasta la fecha, la información facilitada por la empresa se limita a señalar que la interrupción se debe a la realización de “mejoras”, asimismo, la empresa indica que no se responsabiliza de los daños producidos por la interrupción del suministro debido a que ha sido anunciado con la antelación suficiente, por lo que declina cualquier responsabilidad patrimonial ante posibles reclamaciones.
En este sentido, las comunicaciones realizadas por Endesa a través de su página web indican que en caso de que haya algún cliente que requiera de aparatos sanitarios de soporte vital y no haya sido comunicado expresamente, deberá ponerse en contacto con Endesa Distribución a través del teléfono 902 509 600 para notificar su situación.
Por todo ello, instamos al equipo de gobierno, a que en su condición de garante del interés general medie con la empresa para, que según las posibilidades técnicas, se realicen las mejoras, distribuyendo la ejecución de las reparaciones en la red de forma parcial y limitada en momentos a los largo de varios días, en lugar de impedir el del suministro a un número tan elevado de afectados durante 33 horas.
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