El anuncio realizado por el Alcalde de Mérida en el que hace público el inicio de los trámites para la privatización de la gestión del Mercado de Calatrava sitúa al PSOE en clara contradicción con el mensaje que defendía en la oposición, a favor de la gestión pública de los servicios municipales, y en contra de su privatización.
La apuesta por la privatización del Mercado de Calatrava pone de manifiesto la falta de voluntad del PSOE de emplear los distintos instrumentos que pone a su disposición la legislación vigente para el ejercicio de la acción de gobierno, una realidad que adquiere mayor relevancia desde el momento en el que el Ayuntamiento dispone de competencias directas en esta materia, según señala el artículo 25.2.g) de la Ley 7/1985, de 2 de abril.
La realización de proyectos similares financiados y gestionados por la administración dispone de claros ejemplos de éxito como son el de Barcelona o de Santiago, que vienen a desmentir el nuevo discurso del PSOE, que viene a validar las políticas del PP sobre la gestión de servicios públicos y la conveniencia de su privatización.
La falta de vigor del gobierno municipal a la hora de impulsar la asunción de la propuesta de Izquierda Unida por parte del Grupo Parlamentario del PSOE, encuentra su explicación en la defensa de Osuna de la privatización de este espacio como solución a este problema.
Desde IU-Mérida no alcanzamos a entender cuales son los motivos que empujan a Rodríguez Osuna a rechazar la gestión pública de este espacio, así como de los ingresos que podría generar para la ciudad una vez rehabilitado. Para nosotros, la mejor muestra de la viabilidad económica del proyecto es la voluntad de diversas empresas privadas a participar en su gestión, en beneficio propio.
Asimismo, tampoco entendemos las declaraciones del señor alcalde en las que afirma que la situación los comerciantes en el mercado supone una ventaja frente al resto de los empresarios del sector, precisamente cuando se pone de manifiesto el carácter ruinoso del Mercado y las desventajas que este estado supone para aquellos que desarrollan su actividad en este lugar. Una idea, que se ve reforzado por el hecho de que sólo el 10% de los puestos del mercado se encuentran ocupados en este momentos.
Desde IU-Mérida, queremos reivindicar la necesidad de vincular la gestión de los intereses generales con el predominio de lo público, al tiempo que lamentamos el giro que en estos momentos está protagonizando el PSOE, al adoptar posturas opuestas a las defendidas en los tiempos en los que desempeñaba su papel como principal fuerza política en la oposición.
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